Existen diferentes utensilios que nos ayudan a mejorar nuestra salud bucodental y hacerla más completa como es el irrigador dental, especialmente recomendado para las personas que tienen ortodoncia fija o se han colocado implantes dentales. En los últimos meses, muchos de nuestros pacientes nos han preguntado por el uso de estos utensilios para hacer más completa su salud bucodental, por eso hoy les vamos a explicar de qué se trata.
¿Qué es un irrigador dental?
El irrigador bucal es un instrumento de limpieza oral que emplea un sistema de agua a presión, consiste en la aplicación directa de un chorro pulsátil de agua, que elimina de manera muy eficaz las bacterias depositadas en las piezas dentales. Resulta muy útil para limpiar zonas de difícil acceso para el cepillo manual, como el borde de las encías o las bolsas periodontales.
¿Cómo se usa el irrigador bucal?
Este limpiador de dientes a presión debe de utilizarse tras el cepillado diario, siempre que haya un intervalo de al menos 2 horas entre cada aplicación. Para que no provoque daños en las encías es conveniente que se utilice el irrigador un máximo de 5 minutos por uso. Todos los irrigadores dentales están compuestos por tres partes que son el depósito de agua, la bomba y la cánula o boquilla para aplicar bien el agua a presión.
Antes de utilizar el irrigador es necesario rellenar el depósito con agua del grifo, es decir que no es necesario que sea mineral. Se puede incluir un enjuague bucal en el depósito, pero recomendamos que antes siempre se consulte con su dentista de confianza. Normalmente, cada irrigador lleva diferentes tipos de boquilla, según la zona de la boca que queremos higienizar. Antes de que comencemos a aplicar el chorro a presión debemos de regularlo. Para hacer un buen uso del limpiador, es necesario que pongamos la cánula en dirección a la línea de la encía con una inclinación de 90 grados aproximadamente. Siempre recomendamos a nuestros pacientes que empiecen en la línea de la encía haciendo hincapié en la zona interdental, es decir entre dientes.
Cosas que debe de saber del irrigador bucal
El uso del irrigador bucal es muy sencillo para todos y puede tener muchas ventajas para la salud bucodental, aun así, debemos de tener diferentes cuestiones en cuenta como:
-Regular la presión antes del inicio del cepillado.
-No aplicar jamás el chorro sobre las llagas o heridas de la boca.
-Limpiar la boquilla del irrigador cada vez que lo utilice.
¿Quién puede usar el irrigador?
El irrigador puede utilizarlo cualquier persona que tenga conciencia de lo importante que es tener una buena salud bucodental. Pero eso sí, está especialmente recomendado para personas que están empezando un tratamiento de ortodoncia fija, como brackets linguales, metálicos, zafiro, entre otros. También es recomendado para pacientes con implantes dentales, así como personas que sufren enfermedades periodontales como gingivitis o periodontitis. Si tiene cualquier duda con respecto a su salud bucodental, llámenos y pida consulta en nuestra Clínica dental en Cartagena, el Doctor José Ángel Nieto logrará que sonría como nunca.
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