Hemos hablado de las piezas que componen la dentadura, de las partes de un diente y otras patologías que afectan a la salud bucodental. Hoy te queremos informar sobre los tipos de mordida que existen. Si identificas que alguna es la tuya, contacta con nosotros y te ayudaremos en lo que necesites. Es importante tratar a tiempo las mordidas que perjudiquen nuestra mandíbula y estructura ósea para evitar posibles problemas derivados. Obviamente, al hablar de mordida, hablamos del tipo de cierre. Los dientes deben encajar a la perfección, pero las articulaciones también. Así conocerás mas aspectos determinantes de tu salud bucodental.
Tipos de mordida.
Cuando el cierre no se produce como se debería, se le conoce como maloclusión. En caso de que esto suceda, ahora veremos los tipos de mordida que hay, si no se corrige puede acarrear consecuencias estéticas así como dolor de cabeza, trastornos digestivos e incluso problemas auditivos. Te contamos los tipos de mordida y el tipo de tratamiento que se les aplica.
Clase I.
Esta es la mordida correcta donde los dientes encajan perfectamente, causando efecto cremallera. Es lo que llamaríamos mordida normal.
Clase II.
En este caso, la mandíbula muerde más atrás de donde debería. El canino inferior se encuentra justo por debajo o detrás. Se corrige con ortodoncia, extracciones, avance mandibular ortopédico o cirugía ortognática. Es un tipo de mordida inestable y traumática.
Clase III.
Por el contrario que el caso anterior, aquí la mandíbula muerde más adelante de donde debería. El canino inferior está por delante del superior. Se soluciona mediante ortodoncia o cirugía si es un caso extremo.
Mordida cruzada.
La mandíbula inferior se superpone a la superior. Se reconoce porque ello hace que la barbilla sobresalga. Existe tanto la mordida cruzada anterior y posterior, se solucionan ambas mediante ortodoncia.
Mordida abierta.
Se produce una pequeña obertura entre los dientes superiores e inferiores al no lograr unirse de manera correcta. Puede ser ocasionada por herencia genética o ciertos hábitos como chuparse el pulgar o morder lápices. Se combina ortodoncia con cirugía ortognática en ciertos casos.
Borde a borde.
En este caso, los bordes incisales superiores e inferiores quedan en contacto entre sí. Al suceder esta situación, se desgasta el esmalte, lo que propicia alteraciones estéticas en el diente así como sensibilidad. Está relacionado con la Clase III o prognatismos mandibulares.
Sobremordida.
Como su nombre indica, sucede cuando la arcada superior sobrepasa al morder más de la mitad en altura a los inferiores. Los pacientes que padecen este tipo de mordida, la dentadura anterior (frontal) pueden hasta cubrir por completo a los de la mandíbula.
Resalte.
De forma somera se define como la distancia en línea recta que sucede entre los dientes inferiores a los dientes superiores. Suele ser igual o menor a dos milímetros. En niños, el tratamiento para este tipo de maloclusión, precisa de un aparato funcional, para adolescentes, precisa del mismo aparato funcional o tratamiento ortodoncista, dependiendo de cómo se encuentre el paciente y en adultos, se aplicaría ortodoncia o cirugía ortognática si en su caso fuera necesario.
Sea cual sea la mordida que tengas, si crees que es alguna de las que se mencionan como maloclusión, acude sin problema a nuestra Consulta. En Clínica José Ángel Nieto, pondremos nuestro mejor tratamiento y nuestra mejor atención a tu caso para solucionar tu situación y que puedas morder la vida sin preocuparte de las consecuencias que ocasionan este tipo de mordidas. Pide cita en el teléfono 968 52 04 71
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